En segundo lugar, su percepción se distorsionó en otro recuerdo. En lugar de reconocer que lo llevé al punto máximo de excitación, cambió el suceso, para hacer que parezca que fui yo quien hizo algo inapropiado. Ahora me culpabiliza de sus emociones.
Creo que experimenta una disfunción sexual que lo empuja a evitar sus deseos. Otra vez, el temor a la intimidad, la depresión, el estrés, nuestros problemas... Sus reacciones fueron muy dolorosas para mí, que honestamente quería hablar sobre nuestros sentimientos.
Entiendo que no está dispuesto a enfrentar sus problemas. En lugar de presionarlo para conversar, debo darle espacio. Y cuidar de mí misma, esto es muy importante. Siento demasiada angustia, es una situación compleja. Una tarea: ocupar todas las horas del día para no sumirme en la frustración.
Espero que P. algún día pueda priorizar su salud mental y física. Deseo con todas mis fuerzas que esté bien. No puedo responsabilizarme de su salud, pero sí de la mía. "El amor no puede curar una enfermedad mental".