domingo, octubre 15, 2023

Dormí apenas cuatro horas, y al despertar, un dolor agudo en el abdomen me envolvió, retorciéndose en mi interior como una serpiente hambrienta de mis entrañas. Las náuseas me asaltaron, mientras mi cuerpo, presa de la debilidad, temblaba bajo el frío que se deslizaba desde lo más profundo de mi alma. Luché contra esta súbita incomodidad y posteriormente, mi mirada se perdió en un pequeño pájaro que danzaba fuera de la ventana.
Fue Artaud quien en algún momento escribió que "es preciso tener mucha fuerza de voluntad para no dejarse llevar a la eternidad y permanecer en el tiempo". Un zócalo cayó al suelo, quizás a causa de la torpeza de un gato que, en su desdicha, dejó una herida en su pata delantera y ahora se manchaba con su propia sangre. Sin embargo, la duda se posa sobre la realidad, y me pregunto si ese zócalo alguna vez cayó o si el gato es una mera invención de mi mente errante.